La jurisdicción de Vélez-Málaga en el siglo XVIII a través del catastro de ensenada

  1. Martín Bautista, María Teresa
unter der Leitung von:
  1. Juan Jesús Bravo Caro Doktorvater/Doktormutter

Universität der Verteidigung: Universidad de Málaga

Fecha de defensa: 11 von Februar von 2016

Gericht:
  1. Juan Félix Sanz Sampelayo Präsident/in
  2. Mercedes Fernández Paradas Sekretär/in
  3. Nathalie Hadj Vocal
  4. José Escalante Jiménez Vocal
  5. Juan Manuel Matés Barco Vocal

Art: Dissertation

Teseo: 406412 DIALNET lock_openRIUMA editor

Zusammenfassung

Este trabajo aborda las actividades económicas, la población, el urbanismo y la presión fiscal en la jurisdicción de Vélez-Málaga a mediados del siglo XVIII. La jurisdicción de Vélez-Málaga en el siglo XVIII estaba formada por un castillo, una ciudad, 6 pueblas y 15 villas. El estudio socioeconómico de la zona es abordado a partir del análisis de los datos extractados del Catastro de Ensenada, cuyos Libros de Respuestas Generales ofrecen información sobre distintos aspectos. La tesis se estructura en ocho capítulos configurando la realidad socioeconómica de la jurisdicción, atendiendo, en primer lugar, a la descripción principal de la fuente utilizada, el Catastro de Ensenada, en base a las referencias bibliográficas más significativas editadas hasta el momento, para, posteriormente, llevar a cabo un análisis geográfico del territorio y plantear sus condicionantes climáticos, edafológicos, topográficos y climáticos. En el estudio de la población presentamos el origen del poblamiento, para conocer la evolución de la ocupación del espacio jurisdiccional desde finales del siglo XV hasta mediados del setecientos. El sistema productivo del área estuvo centrado en los oficios de sus pobladores. El predominio de la agricultura fue abrumador en unos términos municipales que tenían diferentes calidades de tierras, lo cual propiciaba diferentes aprovechamientos y rentabilidades, no siempre comparables a las registradas en otras zonas andaluzas. Respecto a la producción, el cultivo de la vid experimentó una importancia capital, tanto en lo destinado a la comercialización de vino o, sobre todo, de la pasa, sin olvidar otras plantas de menor peso específico. Junto a ello, la caña de azúcar ocupó un puesto nada desdeñable entre las actividades más productivas. La ganadería y las labores ligadas a la pesca configuraban un sector con mayores posibilidades de recursos para los vecinos de las distintas localidades, lo cual repercutía en la presión fiscal soportada durante décadas.