Efectos de un programa de actividad física y deportiva sobre el desarrollo de las inteligencias múltiplessalud física, social y psicológica

Resumen

La etapa universitaria supone un proceso de constante cambio tanto psíquico, personal, físico y social para todo estudiante. Es por ello que es preciso abordar todos los campos para dar respuesta a las necesidades que presenta la población universitaria. Así en plano psíquico, muchos psicólogos e investigadores se basan en estudios que ponen en la palestra la acuciante necesidad de adoptar y confeccionar un nuevo concepto de inteligencia acercándose a la influencia del aprendizaje personal y a lo puramente emocional. El corpus principal de la teoría de las inteligencias múltiples se nutre de las investigaciones que estudian la mente y el cerebro, o lo que es lo mismo, la neurociencia. La creencia en la existencia de una mente múltiple, funcional y adaptable al entorno impulsa al modelo de inteligencias múltiples hacia la propuesta de una compuesta por diferentes manifestaciones de inteligencia. Así, distingue hasta ocho tipos de inteligencia: 1) Inteligencia Lingüística; 2) Inteligencia Lógico-Matemática; 3) Inteligencia Viso-Espacial; 4) Inteligencia Corporal-Cinestésica; 5) Inteligencia Musical; 6) Inteligencia Interpersonal; 7) Inteligencia Intrapersonal; y 8) Inteligencia Naturalista. Atendiendo al plano personal y social se encuentran los factores psicosociales. El autoconcepto es entendido como un conjunto de creencias que posee cada individuo de sí mismo, así como las propias percepciones de lo que piensan los. Engloba las dimensiones de lo físico, social, académico, emocional y familiar. Sin duda, el constructo más investigado ha sido el autoconcepto físico que engloba la condición física, habilidad física, fuerza y el atractivo físico. Asimismo, sin lugar a dudas, es el factor psicosocial que más influye en las etapas adolescente, joven y adultez temprana. Asimismo, el autoconcepto influye en la propia conducta. Estas percepciones que llegan desde el exterior forman el pilar donde se desarrolla el autoconcepto. Por otro lado, término inteligencia emocional tiene una particular trascendencia y múltiples beneficios en la persona, y definiéndose como la capacidad de comprensión y gestión de los sentimientos tanto los propios como ajenos. En este sentido, los constructos anteriormente mencionados guardan una estrecha relación con las conductas violentas y agresividad entre los jóvenes. La materialización de estas conductas disruptivas se lleva a cabo con componentes físicos (de forma directa o indirecta), verbales, exclusión social, amenazas o por medio del acoso sexual. Haciendo una aproximación al apartado físico y saludable, la actividad física se erige como un bastión de primera necesidad en cuanto a la transmisión de valores sociales, como la investigación e innovación, el ocio o la interiorización por los usuarios que buscan una mejora de la propia salud. Asimismo, y debido a los cambios en la dieta habitual de los jóvenes es preciso observa cómo la dieta mediterránea influye y correlaciona con las variables anteriormente descritas. Todo ello sustenta la necesidad de conocer las características psicosociales, conductuales, físico-deportivas y saludables de la etapa universitaria. Esta tesis tiene como objetivos la descripción de las variables inteligencias múltiples, autoconcepto, inteligencia emocional, actividad física, dieta mediterránea y conductas violentas del alumnado universitario. También se pretende establecer posibles relaciones entre las variables anteriormente descritas, así como desarrollar un modelo teórico, a partir de ecuaciones estructurales, que demuestre las asociaciones entre los citados constructos. La presente tesis doctoral tiene un planteamiento y diseño no experimental, cuantitativo, descriptivo-exploratorio, de corte transversal y ex pos facto con una única medición en un grupo ya que su propósito es la descripción de las variables para analizar su incidencia en un momento determinado. Para esta investigación se obtuvo una muestra de 932 estudiantes universitarios con edades comprendidas entre los 18 y 25 años (M= 20,55 DT= 3,673). La muestra se distribuyó por un 68,3% (n= 637) de mujeres y un 31,7% (n= 295) hombres. Los estudiantes que participaron en el estudio pertenecían a las universidades públicas de las ocho provincias andaluzas. La muestra es representativa asumiendo un margen de error del 1,7% con un intervalo de confianza del 95%. Para la recogida de la información se emplearon varias escalas previamente validadas que presentaban unos altos índices de fiabilidad. Concretamente se utilizaron el Multiple Intelligence Survey (MIS) (McClellan y Conti, 2008), el cuestionario de Autoconcepto Forma-5 (AF-5) (García y Musitu, 1999), el Trait Meta-Mood Scale (TMMS-24) (Salovey et a., 1995), la escala de Conductas Violentas (Little et al., 2003), el test de adherencia a la dieta mediterránea (KIDMED) (Serra-Majem et al., 2004) y una hoja de registro Ad Hoc de tipo sociodemográfico y académico. Para analizar los datos se emplearon los paquetes estadísticos IBM SPSS 25.0 e IBM AMOS 23.0. Para el análisis de los descriptivos básicos se emplean frecuencias y medias. Con el propósito de analizar las relaciones entre variables se emplean correlaciones bivariadas de Pearson, mientras que para determinar la existencia de diferencias estadísticamente significativas entre variables se utilizan comparación de medias de muestras independientes -empleando T de Student y ANOVA de un Factor-. Por último, señalar que el contraste del modelo teórico se realizó a través de análisis mediante ecuaciones estructurales. Como principales resultados, se comprobó como las inteligencias múltiples que más puntuaron en los estudiantes universitarios fueron la intrapersonal, naturalista, visual-espacial y corporal-cinestésica. Las menos valoradas fueron la lingüística, lógico-matemática, interpersonal y musical. El autoconcepto concretó mayores puntuaciones en las dimensiones social, familiar y física para los varones, encontrándose las dimensiones académica y emocional más desarrolladas en las mujeres. La inteligencia emocional ha reportado como los hombres puntuaron más alto en las dimensiones claridad de sentimientos, reparación emocional e inteligencia emocional general siendo las participantes femeninas las que obtuvieron niveles superiores en la atención emocional. Dentro de las conductas violentas, los resultados determinaron como los varones niveles superiores en todas las dimensiones y manifestaciones de la agresividad, destacando las puntuaciones más elevadas en la agresividad manifiesta pura y la agresividad relacional. Dos tercios de los estudiantes afirman realizar actividad física de forma regular. En cuanto a la modalidad de deporte practicado destaca el individual sin contacto seguido de los deportes colectivos con contacto mientras que la modalidad con menor número de participantes es el colectivo sin contacto. Los valores obtenidos para la adherencia a la dieta mediterránea muestran como en torno a los ocho de cada diez estudiantes universitarios necesitan mejorar la calidad o presentan una baja calidad de la dieta. Tan solo dos de cada diez participantes siguen una dieta mediterránea óptima. En la relación entre la práctica de actividad física en relación con las inteligencias múltiples se comprobó como aquellos estudiantes universitarios que afirmaban realizar actividad física con asiduidad reportaban niveles superiores en todas las inteligencias destacando de forma significativa las inteligencias cinético-corporal e interpersonal. De igual forma ocurre con la modalidad deportiva practicada en las que los deportes colectivos con contacto desarrollan en mayor medida las inteligencias lógico-matemática, musical, intrapersonal e interpersonal. Por otro lado, los deportes colectivos sin contacto fomentan las inteligencias lingüística y naturalista. Los deportes individuales con contacto son los favorecen en mayor puntuación la inteligencia cinético-corporal mientras que los deportes individuales sin contacto hacen lo propio con la inteligencia visual-espacial. Las inteligencias múltiples presentaron unos valores superiores en todos aquellos estudiantes que seguían una adherencia a la dieta mediterránea óptima. Destacan las mayores puntuaciones en las inteligencias musical, cinético-corporal, interpersonal y naturalista. El modelo determinó una relación positiva entre las inteligencias múltiples, el autoconcepto y la inteligencia emocional general, siendo la relación con el autoconcepto la más influyente. Asimismo, la inteligencia emocional general se relación de forma positiva con el autoconcepto. Por último, los tres constructos estuvieron inversamente asociados con la agresividad de tipo manifiesta y relacional. Cabe destacar las relaciones inversas entre las inteligencias múltiples y autoconcepto con la agresividad manifiesta. Para finalizar, es preciso señalar como el desarrollo de las inteligencias múltiples, el autoconcepto y la inteligencia emocional ayudan a reducir las conductas agresivas.