Música y músicos entre dos mundosla catedral de México y sus libros de polifonía (siglos XVI-XVIII)

  1. MARÍN LÓPEZ, JAVIER
Dirigida por:
  1. Emilio Ros-Fabregas Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Granada

Fecha de defensa: 18 de octubre de 2007

Tribunal:
  1. Ignacio Luis Henares Cuéllar Presidente/a
  2. Rafael Jesús López-Guzmán Guzmán Secretario/a
  3. Victoria Eli Rodríguez Vocal
  4. Tess Knighton Vocal
  5. María Antonia Virgili Blanquet Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Este trabajo se propone estudiar la música polifónica en la Catedral de México durante el período virreinal (1521-1821) prestando especial atención a los vínculos que la institución, los músicos y los repertorios mantuvieron con la Península Ibérica. La investigación realizada parte de la premisa de que la actividad musical española e hispanoamericana de los siglos XVI al XIX debe considerarse conjuntamente, ya que los territorios españoles constituían un espacio común cuyos límites no fueron disueltos hasta bien entrado el siglo XIX. Pese a su lejanía geográfica respecto a Europa, las catedrales hispanoamericanas participaron activamente de la vida musical del Viejo Mundo. La Catedral de México formó parte de una red panhispánica de instituciones eclesiásticas que se extendía desde Nápoles hasta Manila y que compartían, pese a sus distancias geográficas y culturales, tradiciones musicales y un mismo repertorio. Como consecuencia de esta realidad histórica, resulta fundamental prestar atención a los aspectos de influencia institucional, circulación y recepción de música y músicos. El trabajo se articula en tres volúmenes, con un total de 2140 páginas. El Volumen I (xxx + 795 pp.) incluye el estudio propiamente dicho, que consta de introducción, cinco capítulos y conclusiones. El Capítulo I estudia la transferencia del modelo institucional español al Nuevo Mundo, mostrando las semejanzas y divergencias adoptadas en México con respecto al mismo. A lo largo de este Capítulo se analiza la influencia española en la normativa mexicana, en la organización litúrgico-musical, en los sistemas de provisión de plazas musicales, en la introducción de nuevos instrumentos y en las actividades que la capilla catedralicia desarrolló como colectivo; también en este Capítulo se estudia una de las características marcadamente originales de las catedrales hispanoamericanas, la presencia de músicos indios y de otras razas. El Capítulo II está dedicado a la movilidad de los músicos de la Catedral de México, e incluye tanto el estudio de los músicos de origen europeo como el estudio de la circulación dentro del virreinato novohispano. La movilidad de los músicos es un fenómeno de trascendentales consecuencias en todos los ámbitos; con las personas se transmitían las ideas y también la música, los estilos y las prácticas interpretativas. La falta de estudios de base sobre la mayor parte de las catedrales mexicanas no me ha permitido profundizar todo lo deseado en el estudio de las relaciones con otras catedrales novohispanas, un tema que podría desarrollarse en el futuro. El Capítulo III estudia la circulación de música entre Europa y el Nuevo Mundo a través del ejemplo concreto de la catedral mexicana. Junto a la producción local compuesta originalmente en México, el resto de obras que integraban el Archivo procedían de otras instituciones europeas o hispanoamericanas. Se examina cómo se transmitía la música desde el punto de vista material de uno a otro lado del Atlántico. A través de una selección de ejemplos, se estudian los diferentes patrones de difusión del repertorio musical a la Catedral de México, que podían ser distintos en función del formato en el que se copiaba la música, ya fuera en cantorales de gran tamaño, libros de polifonía o papeles sueltos. La formación del Archivo de Música de la Catedral de México, una consecuencia directa de la movilidad de los músicos y la circulación del repertorio, constituye el tema principal del Capítulo IV. En este Capítulo se estudia el Archivo no sólo como ente físico (ubicación, propiedad de los libros), sino también como fenómeno cultural con sus propios canales de formación. Durante los siglos XVI al XVIII existieron una serie de canales bien definidos que permitían a las instituciones nutrirse del repertorio necesario para sus funciones litúrgicas; la compra, la donación o el préstamo de materiales musicales entre instituciones y personas fueron algunos de ellos, y su estudio resulta determinante para avanzar en nuestra comprensión de cómo se formaban los archivos musicales en la época. Una poderosa herramienta para su reconstrucción son los inventarios y en Capítulo se incluye una discusión de los diversos inventarios de música conservados del período virreinal. El Capítulo V está dedicado a estudiar los procesos de recepción, adaptación e integración de ese repertorio foráneo. Para ello se ha tomado como ejemplo de estudio la colección de libros de polifonía de la Catedral de México, cuya variedad y dilatada cronología permite analizar qué parte de la música recibida en México se integró dentro del repertorio local de la institución a lo largo de tres centurias. Junto a una descripción general de los manuscritos y un análisis de los géneros incluidos, en este Capítulo se estudian estos procesos de adaptación a través de dos casos representativos: el ciclo himnódico y la ceremonia de difuntos. En el Volumen II (vi + 919) se presenta el Catálogo de los 22 libros de polifonía asociados a la Catedral de México. La importancia de este Catálogo es fundamental, ya que ofrece por primera vez a la comunidad científica un instrumento bibliográfico integral para el estudio de la polifonía hispanoamericana. Para la elaboración de este catálogo, que incluye 563 piezas, se ha seguido la normativa internacional de las series de RISM en materia de catalogación de fuentes musicales. Cada uno de los manuscritos aparece descrito siguiendo el modelo empleado en el Census-Catalogue, y de cada obra se presenta el íncipit musical de todas las voces, concordancias, canto llano empleado, ediciones, y grabaciones y un comentario sobre la transmisión de la obra. Tomando como eje la colección mexicana, el Catálogo presenta una visión de conjunto, ya que incluye nuevas concordancias localizadas en fuentes españolas e hispanoamericanas de los grandes polifonistas españoles, lo que permite incluir el repertorio mexicano en las discusiones generales sobre la música ibérica. La elaboración de este Catálogo obligó, en un estadio previo, a consultar e inventariar decenas de libros de polifonía y a familiarizarse con la literatura musicológica pertinente. Los detalles de los manuscritos e impresos consultados 480, repartidos en un gran número de bibliotecas y archivos, así como otras precisiones de carácter metodológico, aparecen en la Introducción al Volumen II. El Volumen III (xi + 380 pp.) incluye dos Apéndices. El primero de ellos consiste en una selección de 99 documentos inéditos procedentes de diversos archivos mexicanos y españoles y ordenados cronológicamente. Se ha creído necesario realizar esta aportación documental por varios motivos. El primero de ellos es porque la visión de la música en la catedral mexicana se sostiene básicamente sobre las investigaciones realizadas hace varias décadas por Stevenson. Muchos de los investigadores que le han sucedido se han limitado a realizar una glosa más o menos literal de sus trabajos, citando los mismos documentos, pero sin volver a consultar documentación de archivo. Por otro lado, la carencia de documentos editados sobre otras catedrales hispanoamericanas a excepción de la monumental aportación de Andrés Sas Orchassal sobre la Catedral de Lima, ha llevado a presentar una selección de materiales inéditos relacionados con los temas tratados. El Apéndice 2 contiene la edición musical de parte del Oficio de Difuntos tal y como se celebraba en la Catedral de México alrededor de 1700; la reconstrucción, integrada por 24 números, incluye tanto las partes polifónicas como las secciones monódicas y recitadas con las variantes locales, y va acompañada de un CD de audio y un DVD con la versión de concierto realizada el 7 de diciembre de 2005 en el marco del IX Festival de Música Antigua de Úbeda y Baeza.